En casa después del cole (Maca, Vero...)

Pedrito me dijo que estaba mejor y que Maca le habia quitado el dolor, luego ella le dijo que se sentara y que iba a servir el café y el colacao. La mire con cariño y ternura, deseaba darle un beso pero no queria estropear nada, volvi a mirar a Pedrito y me agache otra vez junto a él. ¿Crees que mami me daria colacao también a mi?, se lo dije en voz baja para que Maca no nos oyera.

Se volvió a agachar y me preguntó que si creía que mami le daría colacao también a ella. Y en voz baja respondí -Yo creo que sí, pero sino compartimos el colacao.- Le dije con una sonrisa. Yo era muy amable, y desde aquella noche Vero me caía muy bien... Acababa siendo como una tía para mí.

Le mire cuando me respondio eso alli agachada junto a él, mire a Maca con cara de niña buena. Yo también quiero colacao, le dije haciendo como una niña pequeña

Me sorprendí por su petición y su juego y se me escapó una pequeña carcajada ¿Tú tambien quieres colacao? la miré con una sonrisa Pues yo te preparo uno ahora mismo le guiñé el ojo. Preparé dos colacaos y los dejé en la mesa Ea, para mis dos niños... bromeé. Cogí mi taza de café y me senté en la mesa con ellos

Me empecé a reír por que Vero hizo cómo de niña y se puso a mi altura. Cada vez la veía con mejor forma... No sé, la quería y eso me sorprendía porque solo había pasado apenas una noche. -Gracias mami.- Le dije cogiendo mi colacao y bebiendo un sorbo. Se me quedó la espuma en el morro.

Me sente en el sitio que me quedaba libre. Gracias mami, dije imitando a Pedrito y sonriendo mientras veia como él tomaba el colacao y se le quedaba la espuma en el morro, le mire y bebi haciendo que a mi también me quedara espuna igual que a él

Los miré y me reí al verlos hacer las mismas trastadas Mira que sois payasos los dos... me reí mirándolos a los dos. Bebí café, aunque a mí no se me quedó nada manchado, ya que yo bebía café solo. Dejé la taza sobre la mesa Lo que me faltaba a mí es que os compincháseis para traerme a mí loca...

La mire a los ojos, la queria, la amaba y queria decirselo pero no sabia como, mire a Pedrito y sonrei, le pase un dedo por su bigote y le quite la espuma que se le habia quedado en la cara, luego le mire mientras ponia morritos para ver si alguno de los dos me limpiaba a mi la espuma de la cara

Vero me quitó el bigote de Colacao y puso morritos para que alguien se lo quitara a ella -Te queda muy bien el bigote de colacao.- Le dije a Vero guiñándole el ojo... -Mama, quitaselo tú que yo no llego.- Vero era un poco más alta que mama. Y claro, yo aún era un pequeñajo en edad de crecer.

Miré a Vero y me reí por su broma. En otras circunstancias ya sabía yo como le habría quitado el chocolate, pero delante del niño no era plan ¿En serio se lo vamos a quitar? miré a Pedrito Yo tambien creo que le queda bien... miré a Vero ¿se lo dejamos? me reí

Mami dijo que también creía que le quedaba bien, y me preguntó que si se lo dejábamos, de repente, al reírme me entraron unas ganas increíbles de hacer pis.. -¡¡Me meo, me meo, me meo!!-
Salté de la silla y me fui corriendo al baño, cogí una velocidad bastante alta.

Maca dijo que no me iba a quitar la espuma que me quedaba muy bien y se empezo a reir. Pedrito también se empezo a reir y de repente se fue al baño a todo correr, mire a Maca con ojitos, deseaba que me quitara esa espuma con su boquita y esperaba que lo pudiera hacer mientras volvia Pedrito.

En cuanto Pedro salió corriendo miré a Vero y con la mirada nos lo dijimos todo. Me acerqué a ella quedándome a pocos centímetros Creo que te prefiero sin bigote... me reí y le di un beso para quitarle el chocolate. Me separé despacio volviendo a mi posición, por si venía Pedro Mira que eres payasa... me reí mientras me quitaba yo con los dedos algún que otro resto de chocolate que había ido a parar a mis labios Eres peor que él... me reí bromeando

Maca se acerco al ver mi mirada, y lo hizo, me beso y recorrio con su lengua mis labios y mi lengua, un pequeño gemido de placer muy bajo salio de mi boca, luego se sento y me dijo que era peor que Pedrito bromeando. Ahora vas a tener que cuidar a dos niños, dije sonriendo

Dí la bomba del baño, salí, y luego fui a mi habitación, no se porqué la verdad, creo que se me fue la cabeza. Luego volví a la cocina y yo saltimbanqui y sonriente como siempre me volví a sentar en mi sitio.
Y bebí otro trago del colacao, cogí una galleta, la unté y esperé a que se disolviera para que estuviera blandita.

Y vaya qué dos niños... me reí a la vez que le guiñaba el ojo. De pronto, Pedrito entró en la cocina con su energía descomunal. Me fascinaba lo despierto que estaba siempre tan temprano Cariño, ten cuidado con la mano, no puedes ir tan a lo loco... le dije mirándolo. Bebí un poco de café y sujeté la taza con ambas manos sintiendo como el calor invadía las palmas. No sé como te puedes comer las galletas así hijo... miraba su experimento. Había mucha gente que lo hacía, pero yo nunca le vi el atractivo a ese experimento. Aunque bueno, tambien es cierto que yo tambien hacía mis mezclas en casa con la comida, como echarle cereales a las tarrinas de helado, o miel y almendras al yogurt,...

Enseguida volvio Pedrito y empezo a untar las galletas en el colacao esperando a que se deshicieran, Maca le dijo que no sabia como las podia comer asi. Le mire a ella y luego a Pedrito a mi también me gustaba esperar con la galleta mojada en la leche caliente, cogi una y la moje esperando a que se hiciera más blandita, luego me la lleve a la boca y la comi mirandoles a los dos.

Mamá me dijo que tuviera cuidado y luego me dijo que no sabía como me podía comer las galletas así. Luego Vero cogió la galleta y hizo lo mismo. -Ves mama, no es tan raro, Vero también lo hace, y así la galleta está blandita.- Le dije guiñándole el ojo a vero y sonriendole a mama.
Después me comí la galleta, que estaba la mitad blandita y la otra mitad sin disolver.

Los miré a los dos y no pude contener la risa Menudo equipo habéis formado vosotros dos... sonreí. Me bebí lo que me quedaba de café en la taza y me levanté para meterla en el lavavajillas. Volví a la mesa y cogí una magdalena Bueno ¿qué queréis que hagamos hoy? miré a Vero ¿Tú tienes que ir a tu casa a coger ropa o algo? Daba por hecho que pasaría el día con nosotros, aunque verdaderamente no sabía si tenía algún plan alternativo

Maca sonrio al vernos y luego cogio una magdalena, mientras preguntaba que queriamos hacer y luego me miro y me dijo si queria ir a casa a coger algo ropa,la mire ilusionada, no podia creer lo que me estaba pidiendo, mi cara se ilumino, deseaba llamarle amor y cariño, pero no creia que fuese lo mejor, la volvi a mirar. La verdad es que no tengo ningún plan, luego mire a Pedrito ¿ A tí que te apetece?. Luego volvi a mirar a Maca. Quiza algo de ropa me haria falta, aunque para hoy me puedo apañar y quiza no merezca la pena perder el tiempo, le dije intentando averiguar sus intenciones con la pregunta

Mama le preguntó a Vero que si tenía que ir a casa a por algo de ropa, y ella dijo que no, luego vero me preguntó que qué me parecería que se quedara también hoy. Yo sonreí como si me llevase la vida en ello y dije. -¡¡Si!! Quédate porfas, que contigo es más divertido, y eso que solo llevamos conociéndonos desde ayer.- Dije muy muy entusiasmado.

Al ver el entusiasmo de pedrito porque Vero se quedase sonreí emocionada. La verdad tenia razon, habian congeniado demasiado bien en poco tiempo y eso ponia las cosas mucho mas faciles. Bueno, pues Pedrito piensa algo para hacer hoy me termine la magdalena y tranquila Vero, pasamos antes por tu casa y coges lo que necesites. Tenemos todo el dia le guiñe el ojo

Maca le dijo a Pedrito que pensara algo para hacer y luego me miro y me dijo que pasariamos por mi casa a coger lo que necesitase, que teniamos todo el día y me guiño el ojo, aquel gesto suyo y el de Pedrito pidiendo que me quedará me emocionaron e hicieron que una pequeña lágrima cayera por mi mejilla, me la seque rápidamente para que no me vieran lo tonta que me habia puesto

Mama dijo que qué podríamos hacer... -Mmmm... No sé, me da igual.- En ese momento, sabía que era más feliz que un día normal, me entusiasme y Vero no dijo que no... Así que me imaginé que eso era un sí.

Bueno, pues mientras pensais entre los dos, yo voy a recoger esto y el salón me levanté de la silla y cogí las cosas del desayuno que ya habiamos terminado. Comencé a guardar las cosas en el lavavajillas y cuando terminé me dispuse a irme Pensad, pensad, que se os da bien maquinar... bromeé y me fui al salón para arreglarlo un poco. Sí, era una maniática del orden y no podía ver un cojín mal puesto