En casa después del cole (Maca, Vero...)

Cuando mama me dejo sobre la cama me puse en medio y como mama dijo que tenía mucho morro abrí brazos y piernas para ocuparlo todo, mama dijo que les dejara un hueco y así hice. -Bueno vale, que es tú cama.- Me puse normal y me acurruqué a la almohada en medio dejando bastante espacio.

Vi que Vero se puso a un lado de Pedrito y yo me situe al otro, el pequeño se acurruco a la almohada y nos dejo tumbarnos junto a él, le pase mi mano por el pelo en forma de cariño y le bese la frente, note como estaba medio dormido y su brazo se puso sobre mi cuerpo

Sonreí mirandolos a los dos. Ver a Pedrito dormir era algo precioso, desprendía mucha paz e inocencia. Le di un beso en la mejilla Ahora a descansar, que aún queda un ratito para tener que despertarnos le acaricié la espalda. Miré a Vero y le sonreí. La veía bien con mi hijo, y para mí eso era lo mejor que me podía pasar

Cuando vero se tumbó, me acarició el pelo y me dio un beso en la frente, tuve un acto reflejo de poner el brazo sobre su cuerpo. Mama me dio un beso en la mejilla y dijo que había que descansar... Me quedé grogui al poco rato. Yo era de los que entraban a la cama, se ponían a gusto y ala, a dormir.

Mire como Pedrito se quedo dormido con su brazo sobre mi vientre, luego se movio y apoyo también su cabeza, gire la mia y mire a Maca, nunca me habia encontrado en una situación asi, ver la cara de felicidad que tenia Maca me hizo sentirme maravillosamente bien. Te quiero le dije en voz bajita mientras volvia a mirar al pequeño.

*Off* Ahora nos levantamos ¿Nop?

[OFF]Creo que si haber que se te ocurre, pequeño gamberro

*Off* jajajaj gracias por lo de gamberro

Ya era por la mañana y amanecí abrazado a Vero, estaban las dos dormidas...
Prefería no hacer trastadas porque luego me las devolvían así que me levante, con cuidado, y me dí cuenta de lo del brazo, ya se me había olvidado. Salté de la cama al suelo, y no se me escuchó.
Fui al salón puse la tele muy bajito y me puse a ver Boing.

Abrí los ojos un poco aturdida con la sensación de haber descansado poco, aunque ya no tenía mas ganas de dormir. Tardé unos segundos en recordar lo que había pasado por la noche. Miré a mi lado y vi a Vero durmiendo con esa carita de ángel. Sonreí embobada mirándola durante unos segundos. También vi que nuestros cuerpos estaban mas separados de lo que lo estaban normalmente cuando dormíamos juntas, vamos, que vi el hueco que Pedrito había dejado al levantarse. Con cuidado me levanté de la cama, arropé bien a Vero que aún seguía durmiendo y salí de la habitación. Fui al baño a despejarme un poco. Todas las mañanas, lo primero que hacía por costumbre era refrescarme la cara y el cuello. Fui al salón y allí vi a Pedrito en el sofá Buenos días cariño... le di un beso en la cabeza ¿como tienes el brazo?

Escuché como mama se había levantado, y como todas las mañanas se fue al baño a refrescarse, ya era casi como una costumbre.
Vino al salón conmigo me dio un beso y me dijo que como tenía el brazo.
-Buenos días mami, bien, ya no me duele tanto como por la noche.- Le respondí mirándome el brazo. -Es que eres muy buena medico.- Le dije con cara de pillín.

Le sonreí y le acaricié el flequillo Es que tengo poderes mágicos... dije haciéndome la interesante y misteriosa y le hice cosquillas en la barriga ¿Quieres que te prepare el colacao y las galletas? le pregunté mientras le acariciaba la barriga, ahora sin hacerle cosquillas

Me dijo que tenía poderes mágicos, y puso cara de maga, me hizo cosquillas en la barriga, me reí, y me preguntó que si quería Colacao y galletas, mientras me acariciaba la barriga. -Valep, pero yo te ayudo.- Le dije.

¿Sí? Pues venga me levanté y extendí los brazos delante de él para que se subiese en brazosVamos a preparar el desayuno para los tres dije sonriente. Pedrito por las mañanas tenía muy buen humor, bueno lo tenía siempre, pero el de por las mañanas era un humor muy especial.

Me cogió en brazos y fuimos a la cocina, y bueno mientras estaba en sus brazos le dí un beso de buenos días. -Y vero que querrá... Mmmm.- Pensé en voz alta, a modo de pregunta.

Vero querra café, como mami le sonreí. Cuando llegamos a la cocina lo solté en el suelo y me agaché quedándome a su altura A ver, trabajo en equipo dije muy metida en el café Yo me encargo de los cafés y el colacao y tú sacas el zumo y las galletas ¿vale? extendí mi mano para que me la chocase

Le choqué la mano, y me puse en busca de las galletas, que mama siempre me dejaba a mano, en el armario debajo del fregadero. Luego abrí la nevera y cogí el zumo. -Mami, donde desayunamos, ¿Aquí o en el salón?- Cuando había invitados hacíamos todas las comidas en el salón, pero cuando no los había, mama y yo estábamos sentados en la mesa de la cocina.

Mientras él cogía las cosas yo puse el café y el colacao. Me giré para mirarlo mmmmm... mejor aquí Yo sabía que siempre que había invitados desayunábamos en el salón, pero Vero era una invitada distinta. Quería que Pedrito con ella no sintiese que venía una invitada, sino una mas de la familia. En el mueble de ahí también hay magdalenas, por si quieres mi amor me giré de nuevo para sacar el azúcar

Me dijo que mejor aquí, y que en el mueble había magdalenas por si quería. -No me apetecen, pero las saco por si acaso quiere Vero o tú.- Respondí dejando el zumo y las galletas en la mesa, y cogiendo del mueble las magdalenas.

muy bien cariño sonreí. El café se estaba haciendo y el colacao sólo quedaba calentarlo ¿Quieres desayunar ya o prefieres esperar a que Vero se despierte lo miré apoyada en la encimera con los brazos cruzados

Me preguntó que si quería esperar a que vero se despertase o desayunar ya. -Mejor espero, que no me importa.- Dije sonriendo. -Además, esto se va a convertir en tradición de hoy en adelante.- Comenté.

Cuando me desperte vi que estaba sola en la cama, ni Pedrito ni Maca estaban alli, me levante y de la cama y me estire, fui al baño y me di un poco de agua en la cara y por el cuello, también me moje el pelo, me gustaba refrescarme asi y me gustaba dejar que el agua fuese cayendo gota a gota sobre mi cuerpo, luego fui a la cocina y les vi a los dos preparando el desayuno. Mmmmmm, que buena pinta tiene todo esto, comente al entrar en la cocina

Ante la frase de Pedrito me quedé gratamente impresionada. ¿Y te gusta esta nueva tradición? me acerqué a él y me senté a su lado cogiéndole la manita. De pronto Vero apareció por la cocina y le sonreí enormemente Buenos días... ¿has visto? Pedrito le ha dado el toque especial al desayuno sonreí

Me acerque hacia ellos y me agache para ponerme a la altura de Pedrito acariciando su brazo, ¿qué tal esta el enfermito?, dije acariciando su mejilla. Luego me incorpore y mire a Maca, sus ojos irradiaban felicidad. Tiene una pinta maravillosa y yo tengo mucha hambre, dije sonriendo.

Me preguntó que si me gustaba la nueva tradición... -Sí, estamos todos más felices y eso supongo que es mejor.- Me reí. Apareció Vero por la puerta y dijo que tenía buena pinta esto. Luego se agachó a mi altura y preguntó que qué tal estaba -¡Buenos días Vero! Mejor, gracias, cómo mama es una maga me a quitado al menos el dolor- Dije mirándola y sonriendo.

Pues venga, siéntate que sirvo el café y el colacao Me levanté y comencé a servir las tazas. Los miraba de reojo mientras pensaba lo que me habia dicho Pedro. Parecía un sueño todo, no me podía creer que aquello fuese verdad