Replanteándome todo [LIBRE]

Ya era hora de tener un mísero descanso en el día de trabajo que había tenido... Ni una salida, un montón de informes en la cafetería, ningún compañero amable... Ya vale.

Me encerré en mi despacho cerrando el pestillo y me senté... Bueno, seamos sinceros, me tiré en la silla mirando al techo y descansando un poco. Estos días habían sido agotadores, y luego en casa, pese a tener la ayuda de Vero con los peques cansan más de lo que imaginas.
Mi hermano había tenido varias llamadas de atención en el colegio y estaba preocupada por Marta. 
Abrí el escritorio del ordenador y observé que no tenía ningún correo... Me quedé pensando en: Si al final nos mudamos... ¿Cuándo? ¿Cómo? 
No es que me importarse mudarme, pero la verdad es que tenía menos tiempo que un reloj sin pilas. Cogí un bolígrafo de mi escritorio y comencé a morderlo impaciente...
¿Y ahora que hago yo? Todo el mundo trabajando o en el cole, mis amigos de vacaciones... 
Odio estarme quieta un mísero segundo. 

Me cambié de ropa y me puse una normal, de transeúnte, dejando la otra en el perchero y me volví a sentar en la silla.

Marta llevaba ya unos días en casa y la verdad es que ni Ana ni yo teniamos tiempo para casi nada excepto para cuidar de los enanos, ambas eramos tremendamente felices, pero acababamos todos los días agotadas.

Habia decidido dar una sorpresa a Marta y me dirigi a su casa para intentar recuperar su ropa. Cómo habian pasado varios días supuse que sus padres no pondrían demasiadas pegas.

Después del trabajo sin avisar a nadie me fui a la antigua casa de Marta y llame al timbre, me presente y su madre me dejo pasar. Estuve hablando con ella un buen rato y accedio a dejarme llevar algo de ropa. Cuando estabamos recogiendola y preparando una bolsa, llego su padre y pregunto que estabamos haciendo.

Su madre me dijo que no me preocupará que ella hablaría con él y salio de la habitación. Yo me quede acabando de recoger para irme cuanto antes de alli.

Empece a oir varios ruidos y de repente la puerta se abrio bruscamente, me gire y vi a su padre, no pude decir nada ya que su mano golpeo mi cara y me tiro al suelo, intente levantarme, pero me agarro por el pelo y estampo mi cara varias veces contra una mesilla, veia la sangre correr por mi cara cuando senti una patada en mi vientre, aquello me hizo perder la respiración por un instante. Aquel hombre estaba completamente desquiciado y mi cuerpo se convirtio en un saco de golpes, recibi patadas, puñetazos, manotazos, fui lanzada por el suelo y por un instante parecia que todo paro, pero me equivoque, de repente me rompio el pantalón, aunque quise defenderme no pude, luego mis bragitas y luego con gran dolor me violo, no una sino varias veces, entonces volvio a enloquecer y me volvio a golpear, mi cuerpo volaba por la habitación, chocaba contra todo, hasta con un espejo que al romperse me hizo varios cortes no se de que gravedad, estaba practicamente desnuda y destrozada, físicia y psiquicamente, aquel hombre era una mala bestia, no se el tiempo que pudo estar golpeandome y violandome, pero me parecieron horas.

De repente me cogio y me saco sobre uno de sus hombros de la casa, yo no tenia fuerzas para nada, me monto en su coche y comenzo a conducir durante  bastante tiempo, hasta que paro y me saco del coche, siguio golpeandome y haciendome de todo, yo notaba como mis fuerzas me abandonaban y como me iba desmayando hasta que perdi el sentido allí en medio de la nada.

Cuando ya estaba cambiada sin ganas de nada y contando los minutos que quedaban para irme sonó el Walkie y no tardé en volver al mundo real y contestar. "Ana, no sé si molestaré pero tienes una salida, hay un cuerpo cerca de la sierra de Madrid y eres la única que hizo el curso forense-científico que puede investigar el caso y está en guardia..." Suspiré y no me quedó otro remedio que encargarme del caso. 
Cogí el material del laboratorio y me dirigí a la sierra junto a Hector y Pablo. 
No tardamos en llegar ya que era un caso de urgencia y no había mucho tráfico.


Al llegar y salir del coche vi un rostro familiar, una melena rubia, un cuerpo pese a ser golpeado espléndido... 
Se me paró el corazón en un instante cuando distinguí la lejanía que ella solo podía ser Vero y me flaquearon las piernas cayéndome al suelo y llenándose mis ojos de vidriosas gotas de agua.

Estaba destrozada por completo, ni siquiera sabia si alguien sabia donde estaba o alguien me veria para avisar de que vinieran a buscarme. A duras penas respiraba, suponia que junto a mi tenia que haber un tremendo charco de sangre, aunque la mayoría debia estar en casa de aquel bestia.

Me dolia todo el cuerpo y cada vez tenia menos fuerzas, notaba cada vez más frio y creo que incluso mi cuerpo tiritaba, no podia hacer nada sino esperar si alguien aparecia por allí.

Por mi cabeza comenzaba a pasar la película de mi vida, mi infancia con mis padres, el capullo de mi ex, que comparado con este tipo era una hermanita de la caridad, Maca y sobre todo Ana y los peques, no me explicaba porque ahora que todos incluida Marta eramos felices sucedia esto, sentia una gran pena por ellos, por abandonarlos asi.

Ví el charco de sangre, su cuerpo tendido en el suelo como quien deja la basura tirada por la ventana. Reaccioné rápido y llevé todo el material, aunque me diese igual si se caía, no se caía, se quedaba en el coche... Y me acerqué rápidamente dejando a los dos acompañantes detrás. 
En efecto era Vero, y cuando Pablo se acercó dijo déjala, está muerta. 
Con esa frase me rompió el corazón a trozos y no pude evitar tirarme al suelo y abrazar su cabeza echándome a llorar como una boba.

Se que parecera una tontería, allí estaba totalmente destrozada, inconsciente y casi sin vida, viendo como la mia pasaba por delante de mi como cuando dicen que te mueres y senti algo, senti que lo que más queria en mi vida estaba allí conmigo, pero no podia decirle lo que me alegraba de tenerla allí, era incapaz de nada.


[OFF]Postea llorando un poco, y luego aparece Manuela.

Me derrumbé ante su cuerpo que mandé a la mierda a los dos policias que me habían encasquetado y seguí llorando. Mis lágrimas salían por mis ojos como un grifo abierto, y le caían en la mejilla a ella... 
Que puto cabrón ha podido hacerle esto a mi rubia, a mi alma gemela, a mi amor...

Me dirigia hacia el hospital cuando vi una patrulla de la policia parada al borde de la carretera, los policias me dijeron que habia una mujer muerta, les pregunte si estaban seguros y me dijeron que si.

Estuve a punto de irme cuando vi que la policia que estaba junto al cuerpo era la chica que salia ahora con Vero, un temblor recorrio mi cuerpo de pensar que podría ser ella, aparque el coche y me acerque hacia allí.

Ana, que asi se llamaba la novia de Vero estaba agachada abrazada a un cuerpo que podia ser el de Vero.

Ana, es............., dije en un susurro y sin poder decir el nombre de Vero

Al escuchar alguien refiriéndose a mi solo podía tener ira y pena en mi cuerpo, estaba preparada para darle una buena ostia a cualquiera de los dos, a Hector o a Pablo, pero no noté sus voces a si que me calmé un poco y miré su rostro, creo que me sonaba de haberla visto del hospital.
Volví a echarme a llorar y asentí con la cabeza sin poder hacer más.
Ojalá la que estuviese ahí fuese yo y no ella.

No me dijo nada, se giro y asintio con la cabeza, me acerque a Ana y la trate de consolar, luego me agache para comprobar que era Vero, mire a Ana y luego aparte un mechón de pelo de la cara del cuerpo tendido, efectivamente era Vero, no podia creer que estuviera muerta, pase con dulzura mi mano por su cuello y entonces mire a Ana. Esta viva, tiene pulso, es muy débil, pero esta viva

Al escuchar su frase se me iluminó la cara. ¿¡Qué!? Dije asustada. ¿Puedo hacer algo? Cualquier cosa, ¿Tu crees que puede mejorarse? Los nervios me estallaron en aquel momento, me sequé las lágrimas con mi mano e intenté calmarme aún abrazada a su cuerpo moribundo.

La mire y vi su reacción.

Ana, esta muy débil y desde luego necesita que ambas estemos muy serenas, esto es tan doloroso para mi como para ti, pero necesito que sigas mis instrucciones, no podemos pensar ni siquiera en trasladarla sino conseguimos que mejore y se estabilice. ¿Crees que podras hacerlo?, le pregunte mirandole a los ojos

Asentí con la cabeza. Necesito que se recupere, haré lo que haga falta. La miré con toda la seguridad del mundo. Gracias a tí tengo esperanza y ahora no la voy a perder por no querer ayudarte. Volví a mirar a Vero y la besé en la mejilla, si aún estaba algo consciente podía notarlo.

Esta bien, vamos a tratar de estabilizarla y hacer que mejore para que la podamos trasladar, necesitaré un maletín que tengo en el maletero del coche para atender urgencias, le dije mientras vi como se acercaba a Vero y la besaba.

[OFF]Ahora postea Vero y luego tú.

Cuando toda mi vida paso frente a mi, comence a ver una luz blanca, donde aparecia mi querida abuela con sus brazos abiertos, queria ir hacia ella, pero algo húmedo cayo sobre mi mejilla y luego un beso me hicieron mirar hacia atras y vi el rostro de Ana llorando, aquello me atraia casi con más fuerza que los brazos de mi abuela.

Corrí hacia su maletero intentando aguantarme el lloriqueo ahora y cogí el maletín que me había pedido, supuse que al verme así los dos idiotas que me tocaban por compañeros se fueron pero no estaban ahí, con la mirada les dije que se fueran pero ellos no accedieron. Le pasé el maletín a Manuela y esperé a que me indicara con la mano sobre la mejilla de Vero.

Me trajo el maletín y volvio a acariciar a Vero, eso la vendría bien para que pudieramos recuperarla, intente tomarle las constantes y aquello me costo bastante. Esta muy débil y ha perdido mucha sangre, le dije mirandola a los ojos.

La miré y suspiré... ¿Qué podemos hacer para que las recupere? Dije esperando una respuesta... Ojalá se recuperase, la necesito, sin ella no quiero vivir, me niego.

Tienen varias heridas externas que podre intentar cerrar, pero no se si puede tener alguna interna. Necesitará sangre. ¿No sabras que grupo sanguíneo tiene?, le dije mientras abria el maletin y empezaba a mirar el material necesario.

Me preguntó por su grupo sanguineo y me levanté. No tengo ni idea, pero si esperas un segundo lo miro en el coche que tengo una copia del trámite de su denuncia con el historial médico y digo yo que... Me levanté y fuí al coche corriendo, a por el informe, no se porque pero me dejé una copia por sea caso... Creo que hice bien. Lo cogí y se lo dí, la verdad es que para mí los informes e historiales estaban como en chino.

Me dijo que tenia un informe médico de una denuncia, aquello me extraño, pero pense que quiza podria ser de ayuda, no quise preguntar porque tenia una denuncia puesta, aunque supuse que podría ser por el día que la atacaron en el hospital. Mientras ella iba a por el informe, yo comence a curar las heridas superficiales y cerrarlas para evitar que perdiera más sangre por ellas.

Vino y me dio el informe, pero allí no aparecia el grupo sanguíneo. Mire a Ana y negué con la cabeza. Aquí no aparece. ¿Sabes cuál es el tuyo?, le pregunte mirandola de reojo mientras acaba por lo menos de forma temporal con las heridas superficiales de Vero

Se me iluminó la cara cuando me preguntó a mí, me acordé de pronto de que era cero negativo, vamos universal, podía por lo menos de forma provisional hacer una transfusión. Haber, soy cero negativo, si necesita sangre sacamela a mí. Dije ofreciéndole mi brazo. 
Yo no era amiga de las agujas pero joder era Vero, no pienso dejar que se muera así como así.

Me dijo que era cero positivo, aquello significaba que era donante universal, yo también lo era, pero hacerme una transfusión a mi misma y tener que atender a Vero iba a resultar complicado.

Esta bien, pero no se cuanta puede necesitar, yo también soy cero negativo así que si hace falta te ayudaré., dije mientras sacaba lo necesario del maletín.

Dijo que ella también lo era, y que si no era suficiente que ayudaría. No te preocupes, espero que con la mía sea suficiente... Intenté sonreír pero no pude, supongo que no estaré tranquila hasta verla despierta o recuperada.

Esta bien Ana, necesito que estes muy tranquila y que no te pongas nerviosa pase lo que pase. Vamos a hacer que Vero se recupere, le dije mirandola a los ojos