Con Christian {Christian & Libre}

- ¡Vale! – Sonreí – La nintendo DS y de juegos…alguno de FIFA o de coches. – Pedí mirándola y volví a sonreír

- ¿La Ds normal?¿DSI o 3DS? - pregunté mirándole, últimamente me esta viciando a esos juegos más que los niños - Si quieres de coches, puedo traerte mi portátil, que tengo el F1 2010 - sonreí mirándole

iba por el pasillo empujando el tripié con el suero iba despeinada porque acababa de despertarme, habia salido de mi habitacion, los hombres que vigilaban mi puerta no estaban, probablemente los habria llamado mi padre, pero habia un agente de policia y le dije que queria andar un poquito, estaba en el pasillo mirandome, lo miré antes de pararme delante de una puerta abierta donde oí hablar a alguien y vi a un niño y una medico que por detras, crei que era maca por eso entré dentro la amiga pero me di cuenta que no era ella - Hola... - dije con una vocecilla timida - donde esta Maca? - no habia visto a ninguna enfermera y estaba buscando a Maca para que me peinara, me gustaba mas como lo hacia ella, miré a la medico y al niño que estaba en la cama, no lo conocia pero lo salude con la mano

- ¡La 3DS! – Respondí de inmediato. Siempre quise tener una pero mi madre nunca me la compro. – Si puedes conseguirla… - Sonreí ampliamente – Seguro que así no me aburro. – Añadí y al rato alguien apareció por la puerta, era una niña que parecía de mi edad y que preguntaba por Maca pero que con la mano vi como me saludaba. La sonreí y la saludé animado, sin timidez. - ¡Hola!

- Claro, aunque es muy actual, pero haré lo que pueda para conseguírtela - sonreí levemente, cuando vi a una niña tras de mí - Hola, bonita , pues creo que tenía una operación ahora - sonreí mirándola

(me entere donde llevaron al niño y fui a verle )-hola chico ¿como estas (dije mirando a claudia y a la niña )

Miré hacia claudia y hacia el niño, los oí hablar de la 3DS - yo la tengo... mi papá me la ha comprado - dije mirandolo aunque algo timida - puedo dejartela si quieres... pero es rosa... - no sabia si al niño le iba a gustar tocar algo rosa, a los niños de mi clase no le gustaban, decian que las cosas rosas los convertian en niñas, a mi me parecia una tonteria, yo cojia cosas azules y no me pasaba nada - oí que claudia me dijo que estaba en una operacion - vale... - dije algo tristoncilla y entonces vi aparecer, pero como no me dijo nada no saludé y me aparté un poco acercandome a claudia

- ¿De verdad? ¿Te importa mucho el color, Christian? - pregunté sonriendo a Christian, de repente apareció Eva, me preguntaba para que venía otra vez y si se había tomada el café de un trago. -¿Por qué no te quedas con nosotros? Mira yo soy Claudia, y él es Christian - sonreí mirando a la niña.

- ¡Vale! No me importa .- Sonreí, daba igual el color, al fin y al cabo lo que importaba era la consola.. - Y podemos jugar juntos. - Añadí mirándo a la niña.
Entró Eva y la saludé - Hola Eva. Bien, ya no me voy a aburrir aquí, me van a dejar la 3DS- Dije a Eva mirandola y sonriendo.
Luego Claudia la hablo a la niña ofreciendola que se quedase con nosotros.
- ¿Tú como te llamas? - La pregunté

me llamo Gabrielle, espera voya por la consola - sonrei y me volvi con el palo del suero casi se me olvida y me iba a ir corriendo - uy.. - puse bien los cables y fui andandito hasta mi habitacion, volvi al momento con la consola - aqui esta, toma - dije poniendo una mochilita encima de la cama y abriendola - aqui estan todos los juegos, los de coches son los que mas me gustan - saqué de la mochila la psp - yo voy a jugar al gta san andreas, que me lo estoy pasando - me rei, me encantaba cargarme a toda la gente y a los de las bandas, quizas era el instinto mafioso de mi padre que lo llevaba en las venas... realmente nunca lo sabria, miré a la doctora - Claudia , me puedes hacer una cola? - el pelo me molestaba y tenia calor, me lo aparté un poco de la cara

Aunque estaba cansado ya que había sido un día bastante agotador cogí la mochila y miré los juegos que tenía.

- Oye… y ese de san andreas, de que va? – Pregunté curioso, mirandola mientras Claudia la hacia la coleta

- Un placer, Gabrielle - sonreí mirándola y miré el juego, esos a mi nunca me habían gustado, lo único que conseguían era hacer que los niños se hicieran violentos... y de mayores quien sabia como acababan... la voz de la niña me saco de mis pensamientos - Claro, ahora vuelvo - dije y fui a buscar un peine y una goma, volví, me acerque a Gabrielle - Si te hago daño me lo dices ¿vale? - sonreí mirándola