Café en un descanso (Nacho)

Acababa de dar el alta a un paciente y tenia que rellenar unos informes, pero no tenía muchas ganas. Decidí ir a la cafetería a tomarme algo, y además así a lo mejor encontraba a alguien con quien hablar y distraerme antes de ponerme con la pila de folios. Me cogí un café y me senté, estaba siendo un turno largo y tenía que despejarme. Miré a mi alrededor "Vaya que trabajadores están todos hoy" pensé: las mesas estaban la mayoría vacías.

(Había ido al hospital para que ya por fin me quitaran la venda de la mano y al acabar quise ver a mi hermano pero como siempre, había salido con la ambulancia. Decidí ir a la cefetería y en cuanto notara el jaleo que se forma al entrar los del SAMUR ya iría a buscarle. Al entrar en la cafetería pedí un café y me fijé en una chica que estaba sentada en una mesa sola. Era una de las doctoras que me habían atendido aquella noche que...bueno que no estaba en muy buenas condiciones. Me acerqué hasta ella y dije) Parece que sólo nos vemos en esta cafetería. ¿Puedo sentarme?

Me giré y me sorprendí al ver a Nacho, el hermano de Fran, quien había sido uno de mis primeros pacientes hacía ya un mes, al poco de llegar al hospital. Claro que puedes sentarte, precisamente estaba buscando alguien con quien hablar. Le sonreí. ¿Y que te trae por aquí esta vez? Porque por el café no creo que vengas, que precisamente aquí no es que sea una maravilla. Justo cuando se lo pregunté me di cuenta que ya no llevaba ni escayola ni venda, qué rápido pasaba el tiempo.

El café no desde luego, no se cómo no os provoca un agujero en el estómago. (comenté riéndome) He venido para que me quitaran ya todo lo de la mano. Todavía no está del todo bien pero es un gran paso volver a ver tus dedos (mientras lo decía, ponía la mano en la mesa) Como mi hermano está con la ambulancia he venido a esperarle y te he encontrado a ti. Mucho mejor plan estar con tu compañía que con la de my brother. ¿Y tú qué tal? ¿Qué tal te va todo?

Yo todo bien, ya prácticamente me he adaptado hospital. Hoy precisamente un día cansado, pero bueno, lo soportaré. Y tú, a parte de la mano, ¿cómo te va todo? ¿Pudiste arreglar lo de la baja? Di un sorbo al café y me fije de nuevo en su mano. Por cierto, ¿me dejas verla? Dije señalando la mano apoyada sobre la mesa. A ver si te la deje bien puesta. Le sonreí. Fue el primer caso que lleve prácticamente sola y, aunque no había sido nada grave, tenía cierta curiosidad por saber cómo lo había hecho.

Me la dejaste perfecta. Ya empieza a moverse bien y todo (dije mientras le acercaba un poco más la mano y movía los dedos) He estado de baja pero no todo el mes. Y bueno ahora tendré que ponerme a acabar las cosas que no he podido hacer. ¿Así que hoy has tenido un día cansado? ¿Qué pasa que los de amarillo han traído a muchos pacientes o que? (pregunté sonriendo)