Compi de Piso [Mónica]

Entré en mi casa y cómo siempre Troski se subió a la silla para darme la bienvenida. -Que pasa grandullón...- Le dije acariciándole el hocico.
Por detrás estaba Mónica y entre con Troski en mis piernas para que pasase tranquila y no se incomodara.
-Mira Mónica... Este grandullón y cabezón es Troski el pesado de mi perro, Troski a la cocina va venga.- Le dije al perro para que no molestase mucho.
Era muy obediente y le quería un montón, no se que haría sin él.

Acompañe a Julia a su casa, con mi pequeña maleta en la que prácticamente no llevaba nada, cuando abrio la puerta el perro salio a recibirla y se le subio a la silla, luego me lo presento y lo mando a la cocina. Pues si que es un poco grandullón, dije con una sonrisa. Luego mire a mi alrededor y me encanto aquel piso que tenia y como lo tenia amueblado. Es muy bonito, dije con la boca medio abierta de lo que me habia gustado

-Cierra la boca, que te van a entrar moscas.- Le dije riéndome. -Es un grandullón, pero muchos quisieran ser tan cariñoso como él.- Le dije observando como se marchaba a la cocina.
Entré y le hice un gesto a Mónica para que viniese, me dirigí a la habitación de invitados que era muy simple, una cama, un armario y una librería negra.
-Está será tu habitación.- Le dije entrando en ella y encendiendo la luz.

La acompañe cuando me dijo y me llevo a la que iba a ser mi habitación. Es preciosa, Julia muchas gracias de verdad, le dije mientras entrabamos y miraba la habitación. Luego me acerque a ella y la abrace sin poder evitar que unas lágrimas recorrieran mi cara.

Me quedé abrazada a ella. -Enserio, no es nada...- Sonreí mucho al verla así, porque era como si fuéramos amigas de toda la vida y eso me encantaba.
Me aparté un poco. -¿Quieres tomar algo?- Le pregunté.
Luego miré el móvil y vi mensajes de Berta Collado reí porque sería gracioso que viniera hoy, pero no iba a poder que mañana tenía programa.

Me dijo si queria tomar algo y luego miro al móvil prestandole atención. Lo siento, no queria molestarte, ni meterme en tu vida. Me gustaría invitarte a cenar, sino quieres salir, podemos pedir algo.

-No molestas y deja de repetirlo, que por mucho que lo repitas no va a cambiar la cosa.- Río y guardo el móvil. -Pues ahora salir... Estoy algo cansada, a si que si pedimos algo mejor. Y si lo dices por lo del móvil, era solo Berta Collado diciéndome que igual me va a visitar mañana al curro.-

Perdoname de verdad, esto es muy extraño para mi, siento que he congeniado muy bien contigo y me caes muy bien, pero a veces me siento como un estorbo. Le dije con una sonrisa.

Luego me comento que estaba algo cansada, si te soy sincera yo también lo estoy y ese sofá de hay tiene muy buena pinta. Pide lo que quieras mientras dejo mis cosas en la habitación.

-Pues no te sientas como un estorbo... Además Berta es muy maja y siempre está ocupada así que no te preocupes por ella. Y si viene alguna vez, las hemos montado peores con gente más desconocida...- Reí y fui a por la guía de telefonos.
Iba a llamar al típico telepizza de toda la vida. -¿Cómo te gusta la pizza? O si prefieres otra cosa a mí me da igual.-

Me conto lo de su amiga y sonrio. Luego me pregunto como queria la pizza. Me da igual, le dije. Elige tú de verás, le dije mientras acaba de dejar mi pequeña maleta en la habitación y luego volvi hacia el salón mientras ella ya habia llamado y estaba haciendo el pedido.

-Ya está hecho el pedido, y no te pienso dejar pagar eh, que para eso eres mi compañera de piso.- Le dije dejando el teléfono en el cargador.
-¿Me puedes ayudar a coger la comida de Troski? Está en la terraza.- Le dije indicándole un poco... Yo me fui a la cocina y cogí su comedero. Troski era de los perros que cuando tenían que comer se quedaban quietos en un sitio esperando.

Me dijo que no me iba a dejar pagar. Pienso hacerlo es lo menos que puedo hacer para agradecerte esto, luego me pidio que le ayudara con la comida del perro que estaba en la terraza y me indico hacia donde tenia que ir mientras ella cogia el comedero, le di el bote de comida que me pidio, y luego cogi el comedero. Dejame que se lo ponga yo, le dije con una sonrisa

-Bueno bueno... No le eches mucho que a comido esta mañana.- Le dije observando a Troski... Era un pastor alemán muy mono.
-Gracias a ti por tu ayuda y compañia, Troski y yo te estamos agradecidos.- Le dije cogiendo al perro y subiéndolo a mi silla. -Mira Troski, mira quien te está poniendo la comida.-

Ella cogio al perro para que se subiera a su siila mientras le ponia la comida, el perro respiraba profundamente y me parecio que se alegraba al ver la comida. Cuando la tuve preparada me puse en pie y le enseñe el comedero lleno. Mira Trosky esto es para ti, le dije sonriendo.

El perro se bajó corriendo y por su fuerza me movió la silla un poco para atrás. -Ya está el grandullón burro este...- Se le veía contento y eso me alegraba porque como era su primera experiencia con perros tenía que salir bien.
Yo siempre digo que he tenido una gran suerte con Troski... Tiene 4 añitos y sigue igual de juguetón.

Vi que el perro se lanzo hacia mi y empujo la silla hacia atras, en un gesto instintitvo, deje el comedero sobre el suelo y corri para agarrar la silla, con ciertos nervios, pensaba que te tiraba, siento haberle puesto tan contento.

Me reí. -No pasa nada, es que tengo un perro muy burro no es por tu culpa. Le has caído bien por lo que se ve.- Sonreí al ver al perro contento.
Me sonó el whatsapp, lo leí y me entraron ganas de tirar el teléfono por el water... Por eso lo dejé en la encimera de mala ostia pero sin romperlo.

Me dijo que la habia caido muy bien al perro, la mire y sonrei. De repente le sono el teléfono lo miro y leyo un mensaje, luego lo dejo muy enfadada sobre la encimera. La mire y me acerque, agachandome para ponerme con mis ojos a la altura de los suyos. Julia, ¿qué pasa?, le pregunte mierandole a los ojos

Me empezaron a llorar algo los ojos... -Mi ex... Después de 2 semanas se a atrevido a hablar conmigo. Me a enviado un simple "Hola, por favor Julia contéstame" Pero me a sentado muy mal, no puedo con el.- Intenté evitar el llorar pero no pude... Las lagrimas caían solas.

Me conto que era de su ex. Que le pedia le contestase, pero que le habia sentado muy mal, la pobre empezo a llorar como una magdalena, me acerque y la abrace, me dolia verla asi. Mientras ella lloraba le di unos pañuelos que tenia en un bolsillo. Luego no se como me atrevi a cogerla entre mis brazos y llevarla hasta el sofá, la sente sobre el mismo y me sente junto a ella, luego la abrace y apoye su cabeza sobre mi hombro. Tranquila preciosa, llora lo que quieras y desahogate conmigo.

Me cogió en brazos y me llevó al sofá. -Es que lo pasé fatal... Y pensaba que lo había superado pero esto...- Le dije con la voz entre cortada y me quedé llorando un poco más.
-Amigas así se necesitan... Gracias de verdad.- Le dije quitándome alguna lágrima de la cara con el pañuelo que me ofreció antes.

La abrace y acaricie con ternura como las amigas saben hacer. Miranos aqui las dos hechas polvo por nuestras relaciones, dije esbozando una pequeña sonrisa, ya que yo tampoco estaba mucho mejor que ella con todo lo pasado con Javi, apoye mi cabeza sobre la suya que estaba apoyada en mi hombro y acaricie su mejilla con dulzura.

Le acaricié la mejilla. -Pues sí, las dos hechas polvo... Pero bueno, esto es lo que se llama apoyo mutuo.- Sonreí y puse la TV.-¿Quieres ver algo?-
Vino Troski y se sentó en la alfombra debajo de la mesa del salón.

Me dijo si queria ver algo en la tele, la verdad es que me da igual, cualquier cosa que nos distraiga creo que nos ira bien, le dije mientras sonaba el timbre, suponia que era la cena. Espera que voy a abrir, le dije apoyando su cuerpo con cuidado sobre el sofá

Sonó el timbre y Mónica se fue a contestar. Mientras yo puse el telediario que no solía ver porque para ver que mal estaba el país solo teníamos que ir al hospital.
Me imaginé que era la cena.