Descansando (Maca) +18

Sus gemidos me excitaban cada vez mas y eso hacía que intensificase mis besos y mis caricias sobre su cuerpo. Me movía despacio sobre su cuerpo sintiendo como nuestra piel se excitaba al mismo tiempo. Sentir sus caricias me hacía respirar cada vez mas rápido, me estaba poniendo a cien. El cansancio que traía del hospital se había esfumado y se había convertido en excitación. Besaba sus labios con pasión, con ternura, con ganas, con amor, con mimo,... Vero se había convertido en una parte de mí imprescindible

Nuestros cuerpos se rozaban poro con poro, nuestros pechos se acariciaban entre si y nos iban excitando cada vez más, movi un poco mis caderas haciendo que su zona más íntima se juntara con la mía, nuestras manos recorrian el cuerpo de la otra muy despacio con delicadeza y ternura, nuestras bocas hacian lo mismo con la boca de la otra sin quererlo nuestras respiraciones se agitaban y nuestros cuerpos temblaban con dulzura y gemian con más dulzura, ninguna corria, ninguna pedia más sólo nos dejabamos llevar y nuestros cuerpos reaccionaban sin prisa y sin gran pasión todo era delicadeza, ternura y amor.

La temperatura subía en nuestros cuerpos a pesar de que el agua se comenzaba a enfriar. Llevé mis manos a sus pachos para masajearlos con ternura, con pasión. La besé en los labios y la miré a los ojos Te quiero... susurré y volví a besarla en los labios. Sentía mi sexo junto al suyo, uniéndose y envolviéndose en pasión. Me encantaba cada roce con su cuerpo, me encantaba estar con ella. Habíamos pasado del desenfreno y la desesperación, a la pasión, al cariño, al amor. El comienzo de las relaciones siempre eran algo maravilloso, y con Vero era mucho mejor a como me lo había imaginado

Sentir sus manos sobre mis pechos me hizo suspirar, Maca sabia como tocarme y como excitarme, abri levemente mis piernas lo que hizo que su cuerpo resbalara un poco entre ellas y nuestros sexos se rozaran aún mejor, aquello casi me hace gritar por el placer recibido con aquél mínimo roce, aún sin habernos tocado en nuestra intimidad ambas estabamos totalmente excitadas y entregadas y nuestros sexos estaban temblorosos, en nuestro íntimo contacto se podia notar aquello. Subi mis manos por su espalda y acaricie su cuello, luego las pase por el costado de su cuerpo y al llegar a sus pechos las pase hacia delante para acariciarlos y masajearlos como ella estaba haciendo con los mios.

Sentí sus manos en mis pecho y de lo mas profundo de mi garganta salió un gemido de placer. No Podía aguantar mas, necesitaba sentir mas de ella, necesitaba darle el máximo placer posible. Ven conmigo... susurré con la respiración entrecortada. Me incorporé en la bañera. Alargué el brazo y cogí una toalla, entonces la ayudé a salir de la bañera y envolví nuestros cuerpos con la toalla. Estábamos pegadas por competo, sintiendo cada centímetro de nuestra piel entrar en contacto. No parábamos de besarnos. La rodeaba con mis brazos sujetando la toalla mientras caminábamos en dirección al dormitorio. Al llegar, caímos sobre el colchón, quedándome y sobre ella, aún no estábamos secas del todo pero nos dio igual El agua se estaba empezando a enfriar, y yo no quiero que mi niña coja frío... susurré juguetona entre besos

Ella también gimio, me dijo que fuera con ella y me ayudo a salir de la bañera, nos tapo a ambas con una toalla y nuestros cuerpos permanecieron juntos y besandose hasta llegar al dormitorio donde caimos sobre el colchón, luego me dijo que no queria que me enfriase, la mire a los ojos y disimule como su estornudase dos o tres veces para ver su reacción.

Vi su juego y se lo seguí sin dudarlo ¿ves? te vas a resfriar... le di unos besos mimosa en sus labios Voy a tener que darte mimos para curarte... seguí besándola con ternura. La toalla cayó sobre el colchón y nuestros cuerpos quedaron desnudos cada vez mas excitados. Entrelacé mis manos con las suyas y las coloque a ambos lados de su cabeza mientras me movía pasionalmente sobre ella

Me siguio el juego y me dijo que me tendria que mimar, siguio besandome y yo le respondia, luego se coloco sobre mi y cogio mis manos con las suyas, entrelazando nuestros dedos mientras su cuerpo se movia sobre el mio, estaba completamente entregada a ella que parecia querer llevar el ritmo. Te amo, le dije entre pequeños gemidos de placer

Me movía sobre su cuerpo sintiendo como se erizaba su piel. Mi sexo y el suyo se encontraban en medio de un mar de excitación. Mis labios recorrían su cuello llenándolo de besos y dejando algun muerdo cariñoso. subí a su oído y dejé en él algunos besos. Mis manos apretaban las suyas producto de la pasión. Me volvía loca estar así con ella

Maca me tenia controlada por completo sentia su excitación junto a la mia, abri mis piernas levemente para recibir mejor su contacto, no callaba ningún gemido ni ningún movimiento de mi cuerpo recibiendo el placer que me iba dando poco a poco. Preciosa me tienes a mil, le susurraba entre pequeños gemidos

Sus palabras me hicieron soltar un gemido intenso. Vero, además de un cuerpo maravilloso, tenía la habilidad de excitarme con su voz tan sensual Tú a mí tambien... contesté atacando sus labios de nuevo. En un impulso la cogí y me giré quedando esta vez yo debajo de su cuerpo. Mis manos recorrieron su espalda de arriba a abajo y acabaron en sus nalgas apretándola contra mí para sentir aún mas su sexo contra el mío

De repente Maca se movio y cambio nuestas posiciones, ahora era yo quien estaba sobre ella, nuestros sexos se seguian rozando, me movi rozando con mis pechos los suyos y notando como ambas gemiamos, para luego situar uno de mis pechos a la altura de su boca, rozandolo con sus labios, lo que me excitaba aún más, flexione un poco una de mis piernas y situe una de mis rodillas sobre su sexo acariciandolo y rozandolo con ella

Estaba a mil por hora. Cuando Vero acercó uno de sus pechos a mi boca, no dudé y me lancé a él con mis labios. Lo bese y succione su pezón, notando como se ponía mas duro. Subí mis manos hacia él y a la vez que lo besaba lo iba masajeando. Cuando sentí su pierna en mi sexo mi cuerpo dio un vuelco de excitación. Sentí como todo mi cuerpo temblaba al contacto de su pierna con sus caricias. Seguí besando sus pechos entre gemidos y masajeándolos. Estaba tan excitada que de forma instintiva en uno de ellos le di un muerdo que le dejó una pequeña marca

No se lo penso y comenzo a besar y succionar mi pecho aquello me puso a cien y no pude evitar gemir de placer, su cuerpo empezo a temblar cada vez más y su boca se volvia loca para satisfacerme, de repente me dio un pequeño mordisco que creo no pudo controlar, busque sus pechos con mis manos y los masajee, mientras con mi boca recorria la suya y luego su cuello, fui bajando con pequeños besos hasta sus pechos y entonces los bese y los chupe con gran deseo, luego baje hasta su ombligo y lo recorri con mi lengua, mientras acariciaba su sexo con mis pechos y rozaba con mi excitado pezón su clitoris que estaba completamente húmedo.

Oohh Vero... Gemí al sentirla moverse así sobre mi cuerpo. Aquello me ponía mucho y estaba poniendo cada vez el corazón mas acelerado. Mis manos agarraron fuerte las sábanas y de mi garganta salían gemidos descontrolados. Sentir su lengua en mi vientre era una sensación alucinante. Su pecho estimulando mi clítoris me estaba llevando al cielo, era algo que me encantaba, que se había convertido en mi droga, quería mas y mas de ella

Sabia que jugar con su vientre la enloquecia, pero no esperaba que aquel gesto inocente de rozar mi pezón con su clítoris la pusiera tanto, la mire y sonrei viendo su gesto de placer descontrolado, con mis manos acaricie su sexo y lo excite un poco más, luego cogi mi pecho y lo meti con profundidad en su sexo rozando por completo su ya totalmente excitado sexo que estaba a punto de estallar, notaba como yo también estaba muy excitada.

Al sentir su pecho rozando de esa manera mi sexo enloquecí enormemente Oh... Vero... sí... gemía con la respiración entrecortada. Me estaba volviendo loca. Nunca me había excitado de aquella manera y me estaba encantando. La veía a ella que tambien estaba a mil por hora y eso me excitaba aún mas. Gemía compulsivamente con cada roce de su pecho sobre mi clítoris, estaba loca

No me lo pense y viendo su estado de excitación baje con mi boca hasta su sexo y lo lami, recorriendo con la punta de mi lengua su totalmente excitado clitoris y mordisqueandolo con suavidad tirando levemente de su punta

Cuando me lamió de aquella manera mi cuerpo se contrajo. Ohhhhh Vero...!!! No pares... síiiii síii...!!! Gemía de tanto placer. Mis manos casi de forma instintiva se enredaron en su pelo acariciando su cabeza que estaba entre mis piernas. Me estaba llevando a la gloria, estaba totalmente mojada por las cosas que Vero me hacía. Gemía y jadeaba cada vez mas y mas. Vero me llevaba a lo mas alto y me producía el placer mas absoluto que había experimentado jamas

De repente su cuerpo estallo, mi pecho quedo completamente empapado de ella y aquello me excito sobremanera, sentirla asi hizo que un pequeño escalofrio de placer recorriera mi cuerpo, era maravilloso ver su cuerpo estallar en mis manos y oir sus gemidos y gritos de placer, sabia que ya era completamente mia, movi mi cuerpo y continue masajeando y pellizcando levemente sus pechos para buscar su vagina con mi lengua y penetrarla con ella lamiendo con ternura sus paredes, su cuerpo no dejaba de explotar y me encantaba verla disfrutar asi

Mis gemidos se convirtieron en gritos de placer. Vero sabía cuales eran mis puntos débiles, los conocía muy bien. Su lengua en mi sexo, penetrándome de aquella manera me llevaba a lo mas alto de la excitación. Mis pechos estaban totalmente excitados, mis pezones se entregaban a ella y mi garganta sólo podía gritar su nombre.

Maca estaba entregada y derrotada su cuerpo no dejaba de explotar y de gemir, le queria dar aún más recuerdo que al estudiar se decia que se podia llegar a perder el conocimiento del placer recibido, la verdad es que yo jamás lo habia sentido ni lo habia visto, tampoco lo buscaba pero queria darle a Maca todo lo que su cuerpo aguantará y mucho más, ni siquiera la mire.

Continue moviendo mis manos sobre sus pechos y pellizcandolos para luego bajar por su vientre y buscar la entrada de su vagina donde tenia mi lengua, entonces la penetre con mis dedos, acariciando su interior sin ninguna dificultad, mientras mi lengua besaba, succionaba y mordisqueaba su clítoris, podia notar como tanto su vagina como su clítoris temblaban y se contraian con gran ritmo, movi un poco más mi lengua en busca de su punto más débil que no me costo encontrar y entonces le dedique toda la atención de mi lengua a esa zona tán débil y placentera para una mujer, ahora si que estaba disfrutando por completo

Cuando me penetró con su mano noté como una descarga electrica recorrió mi cuerpo de arriba a abajo. Su lengua en mi clítoris me estaba llevando al cielo. Vero era una fiera, sabía lo que me gustaba y lo multiplicaba por mil Ve...ro... Síii... gemía con la respiración entrecortada. Era un cúmulo de placer que jamás había experimentado. Su lengua recorriéndome y dándome placer era impresionante. Estaba a punto de estallar estaba llegando al pico mas alto de excitación gracias a sus manos y a su lengua. Gemía y jadeaba cada vez mas fuerte

Solamente la oia y sentia como se movia y gozaba, aquello me encantaba y me excitaba también a mi, abri un poco más mis dedos en su interior, llegando hasta la zona más escondida de su vagina que era muy débil y placentera para las mujeres y a la que rara vez nos accedia alguien, pero ella estaba tan entregada que con un poco esfuerzo la localice y comence a acariciar mientras mi lengua seguia en la zona más débil y placentera de su sexo, aquello la estaba llevando a un estado de placer increible, si era cierto lo de perder la consciencia Maca tenia todas las papeletas para hacerlo en medio de aquella explosión de placer que estaba recibiendo

Vero consiguió llevarme a lo mas alto. Estaba teniendo uno de los mejores orgasmos que había tenido en mi vida. Gemí ansiosa, cada vez mas fuerte, apreté las sábanas con mis manos agarrándome a ellas. De pronto llegué a lo mas alto, a ese momento donde te quedas dos segundos sin respiración, donde experimentas el placer mas absoluto, y poco a poco noté como mi cuerpo, aún tembloroso, comenzaba a relajarse. Estallé en un orgasmo maravilloso gracias a sus manos y su lengua que aún seguían haciendome sentir aquella magia en mi cuerpo. Mi cuerpo temblaba. Estaba sudando, agotada por la pasión. Estaba totalmente mojada. Me incorporé levemente para ver el cuerpo de Vero aún entre mis piernas. Era maravilloso, muy erótico y sensual