Recuperacion de Raquel Nieves(Raquel,Vilches,Libre)

Me encontraba observando la ventana de mi habitacion, puesto que mi padre habia ido a casa de mi abuela a ducharse y cambiarse de ropa. Ya habiamos hablado, le habia contado lo que recordaba del incendio, y nos habiamos consolado mutuamente con la muerte de mi madre. Me gire al ver que entro el doctor. Sonrei levemente al oirlo.
-Hola doctor, digame, ¿tengo algo mal o ha salido todo bien? -Pregunte mirandolo seria de nuevo.

Lo escuche atentamente y me alivie de que mis pulmones se fueran a recuperar pronto, con el tratamiento. Pero lo que siguio despues de mis piernas, fue como si me hecharan un jarro de agua fria por encima. ¿Mis piernas? No podia sin ellas, eran mi instrumento, adoraba bailar.
-No, no.. no puede ser. -Dije mientras varias lagrimas empezaban a caer de mis mejillas- ¿Se recuperaran pronto? Digame que si, por favor.

Se acerco a mi y me abrazo, agarrandome la mano. Lo abrace aun con lagrimas en los ojos, agradeciendo tener apoyo en el hospital. ¿Unos meses? Iba a tener que soportarlo, pero como me llamaba Raquel, que conseguiria andar lo antes posible.
-Espero que respondan pronto. Gracias doctor. -Dije suspirando, apartandome de su abrazo, secandome las lagrimas con el dorso de la mano.

Suspire sonriendo, esperando que las palabras del doctor fueran ciertas. Al oir que llamaban a la puerta, me gire viendo a una chica joven, con el uniforme que debia ser del samur, alguna que otra vez los vi en la calle. Pero esta chica en concreto no me sonaba de haberla visto.

Los escuche sonriendo levemente. Asi que ella me habia sacado de mi casa en llamas, junto a mas gente. La mire al oir la pregunta y sonrei levemente encogiendome de hombros.
-Bueno, he salido viva, que es lo importante, ¿no? -Pregunte mirandola y mire al doctor al oirlo, sonrei abiertamente. Adoraba bailar, pero no se lo habia contado yo, quizas habia hablado con mi padre.

Asenti, añadiendo a mi memoria el nombre, Irene, por si alguna vez me hacia falta. Los escuche a ambos, y sonrei amable mirando al doctor.
-Siento decirle esto, doctor, pero no me parece que sea usted tan borde. -Dije sonriendo sinceramente.

Rei un poco al oir lo que dijo el doctor, en verdad no me parecia a que debiera esa fama. Escuche la pregunta de la enfermera y le sonrei, pero sacudi la cabeza.
-Yo aun no tomo cafe, soy demasiado pequeña para eso. -Dije con una leve risita.

Escuche la pregunta de la enfermera y asentí sonriendo.
-Si, por favor, eso seria maravilloso. -Dije sonriendo mirándolos a ambos, cuando el doctor Viches hizo el ademan de sacar el monedero tras preguntar si tenia suficiente para todo. Yo no tenia nada aquí, así que no podía ayudar.

Vi que el doctor puso también mi parte de dinero y sonreí. La verdad es que aquí me trataban muy bien, eran muy amables conmigo, no podía quejarme, la verdad.
-Gracias doctor. Algún día lo invitare, para compensarlo. -Dije sonriendo mirándolo.